El otro día me comento esto una amiga, y me preguntaba si
pensaba que fuese infidelidad. La infidelidad es un término muy difícil de
delimitar y definir. Desde mi punto de vista lo que hace mi amiga no lo
considero infidelidad, es más considero que esas fantasías la impiden caer en
la rutina y le ayudan a disfrutar y avivar la pasión y el amor.
No sé si a vosotros también os pasa, pero cuando llevas una
determinada cantidad de tiempo en una actividad, por ejemplo, el trabajo, se
tiene a crear una rutina y perder esa especie de adrenalina y ganas de conocer
lo que nos deparara cada día. En pareja me parece que pasa algo parecido, los
primeros meses, o incluso años se vive la fase de enamoramiento, de esperar
cada día para veros, pero con el paso del tiempo esto se va perdiendo, y se
tiene a normalizar la situación, perdiendo esa ilusión inicial. Por lo tanto y
viendo esto, no veo que tiene de malo crear ciertos mecanismos que consigan que
la chispa se mantenga. La estrategia de mi amiga me parece tan buena como
cualquier otra estrategia que nos permita no caer en esa rutina y perder los estímulos
y las ganas de continuar.
Por todo esto yo pienso que no hay que darle más vuestras a
las cosas, y hay que tratar de ser más felices. Con esto no quiero decir que
hagamos lo que queramos, sino que seamos consecuentes, tengamos las ideas
claras, y seamos capaces de actuar de la forma más correcta que nosotros
creamos.
Así que ya sabemos, pensemos menos y actuemos más, pero
siempre con la mejor intención.
La se mana que viene más.
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