Siempre digo y pienso que con trabajo y esfuerzo siempre se
puede mejorar en todos los aspectos de la vida. Como padre, madre, el optimismo
o cualquier ámbito en el que queramos mejorar, también creo que parte de esto
viene en nuestra información genética, y eso han descubierto en la facultad de
psicología de la universidad de Oregon, acerca de las personas bondadosas. Si
bien podemos trabajar para tratar de ser más bondadosos también es verdad que
estos investigadores han descubierto que las personas bondadosas se ver
reportadas con una sensación placentera, similar al que nos aporta el sexo, por
lo tanto cuando vemos una persona bondadosa y vemos hacer estas cosas, (con
cierta envidia) nos contestaremos a nosotros mismos sabiendo que en cierta
manera se está sintiendo mejor. Lo cual no nos tiene que servir de excusa para
no trabajar y esforzarnos para tratar de ser nosotros también un poco más
bondadosos, y un poquito mejor persona cada día, ya que la genética aporta su
granito de arena, y nuestras ganas aportan casi tanto o más que lo que nos da
la genética.
Así que ya sabéis, transmitiendo un poquito el mensaje de
siempre con esfuerzo y trabajo duro se consiguen las cosas. Tratemos de
esforzarnos en ser un poco más bondadosos.
La semana que viene más.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarYo tengo una fórmula mágica desde que tenía pues no sé, 17 o 18 años. Lo curioso es que ha soportado todo tipo de embites, retos y desafíos. Se ha mantenido impertérrita como un puto soldado de los TERCIOS resistiendo en formación el empuje de fuerzas enemigas y siempre saliendo victoriosa de cada batalla.
ResponderEliminarEl instinto apunta.
La inteligencia establece.
La voluntad conquista.
Fuerza propulsora: COJONES.
Así de simple. Siempre lo digo. En la vida solo necesitas tres cosas: VOLUNTAD, INTELIGENCIA y COJONES.
El resto son excusas. Y en la vida solo hay DECISIONES ENÉRGICAS que tomar.
De lo que se trata es de transformar esa realidad objetiva y que escapa a vuestro control e incluso a vuestro conocimiento y/o percepción de la misma. Se trata de ordenar vuestra realidad material de acuerdo a los designios que emanan de vuestra voluntad que a su vez tienen su origen en la inteligencia y más profundamente el instinto. He ahí la clave del éxito; la clave de la felicidad. Una voluntad bien definida es siempre la aplicación práctica de la inteligencia. Pero la inteligencia en sí misma no sirve pues no somos autómatas. No seguimos siempre procesos lógicos. Existe un fuerte componente irracional, animal expresado a través del instinto.
Yo parto de una mente racional y coherente con la lógica del pensamiento aun admitiendo una fuerte carga vitalista y pasional que golpea fuerte. Se trata de aunar animalidad instintiva con una inteligencia práctica, de vocación artística. La vida es una constante toma de decisiones. Ahora mismo estáis decidiendo leerme y quizá responderme. Todo se basa en encaminar esa toma constante de decisiones hacia un objeto devenido de ese proceso que aludo en mi post. No hay más misterio. Decisiones enérgicas es todo. Si no hay decisiones hay excusas, hay quejas, hay lloros, hay malestar.
La partida se juega con unas cartas. Esto es cierto. Pero el margen de cambio es inmenso porque dispones de TRES fuentes inagotables de recursos. Si son malas dichas fuentes pues te jodes aunque siempre puedes mejorar. Si son buenas y las empleas como debes el límite es el cielo.
No niego que haya límites pero como expreso el margen de cambio es inmenso. Otra cosa es que seas un inútil con la cabeza y digas: quiero tener un Testarossa, 200000 millones en el banco y el cuerpo de Jay Cutler. No. Eso no. Pero un M3 de 15.000 € sí. Un cuerpo machado con voluntad y cojones a lo largo de años también. Y un nivel de vida que te permita vivir cómodamente sin renunciar a ciertos placeres también.
Todo depende del grado de voluntad que le pongas y de cuánto dé tu inteligencia. La vida siempre devuelve algo. Y tú eliges ese algo.
Hay que devenir en un puto TORO. Un puto LOBO. Brava animalidad instintiva aunada con inteligencia práctica.
El rollo intelectual-libritos-siglo XIX está muy bien para la intimidad, para enriquecerte como persona y para ser un tío culto. Mas la vida real exige COJONES, exige testosterona elevada a la máxima potencia con un BMW de 193 cv rugiendo duro y un GUERRERO al volante con Café Quijano dándolo todo en el Pioneer. La vida civil para mí no se diferencia mucho de la castrense salvo por el hecho de que una y otra están orientadas hacia distintos objetivos. Yo cuando pongo un pie en la calle voy en estado de constante tensión. Tienes que ser un puto animal salvaje, un puto LOBO territorial. Tienes que estar cuadrado para imponer y tener COJONES para liarla. Eso moja bragas y te define como GUERRERO. Una mujer tiene que admirarte, tiene que saber que eres un puto HOMBRE. Eso se traduce en cash, chulería sana, kick-boxing, músculo, BMW, COJONES. Tienes que ir con la cabeza alta contra todo y contra todos. La sociedad es el enemigo a abatir. Cuando eres un puto TORO las mujeres lo saben y quieren que las ames duro. No perdáis el tiempo, empezad a machacaros en el TEMPLO y a leed a Nietzsche. Necesitáis ser FUERTES a golpe de mancuerna y filosofía alemana. Yo soy un puto soldado espiritual de los Tercios pero vosotros podéis ser un puto Dominator imperial.