Llevo tiempo fijándome en el sistema educativo, desde cortas
edades hasta edades mucho más avanzadas. No voy a entrar en el sistema
educativo desde el puto de vita de cómo se imparte la educación, lo que se
exige, ni cuál es la mejor forma de evaluar los conocimientos. Lo que quiero
analizar es como con el paso de los años de educación vamos perdiendo nuestra
creatividad, creo que la educación tal y como esta estructura es lo que consigue.
La reflexión me surgió cuando me encontraba rodeado de niños
pequeños les observaba pasmado al ver lo creativo que son. La imaginación que
tienen, como de un dibujo sacan conclusiones a los adultos jamás se nos ocurriría.
Respuestas que para ellos son obvias, nosotros ni nos lo planteamos, ¿y eso por
qué? Pues sencillamente porque el sistema educativo desde mi punto de vista
está enfocado para crear una especie de robots que piensen de una determinada
manera. Y que no nos salgamos del camino marcado.
Con estas líneas no pretendo ni mucho menos que se deje de
estudiar, o se abandone el sistema educativo, solo pretendo que seamos
consecuentes de lo creativos que todos éramos cuando éramos mas jóvenes y que
algunas veces salirse del camino y pensar de forma diferente las cosas nos
pueden hacer ser mucho más creativos, y en muchas momentos marcar la
diferencia.
Así que ya sabéis, animo con la creatividad, y esforcémonos por recuperarlos.
La semana que viene más.